La ciudad de Alicante forma parte de la Comunidad Valenciana y es uno de los centros turísticos más importantes de toda la península.
Por su clima tan placentero es ideal para los turistas amantes del mar, quienes pueden disfrutar de sus costas alicantinas. Además, esta ciudad también alberga en su interior un amplio patrimonio cultural e histórico, por lo cual, bien puede decirse que Alicante es una ciudad para todos los gustos. Podrás admirar iglesias y edificios antiguos en el casco histórico, mientras que en la ciudad moderna podrás disfrutar de lo mejor del arte contemporáneo.
Hay muchos lugares que no se pueden dejar de visitar en Alicante cuando uno se encuentra allí de turismo. El Castillo de Santa Bárbara es uno de los más importantes. Se encuentra en la cima del monte Benacantil y casi al borde del mar, por lo que el turista puede gozar de una fantástica vista panorámica de la región.
Destacan en este castillo la Torre del Homenaje, Parque de Ingenieros y Salón de Felipe II. La roca más sobresale en este conjunto arquitectónico se le conoce como «cara del moro» por parecerse a un rostro humano, convirtiéndose desde hace mucho tiempo en símbolo de la ciudad.
Otro lugar a visitar es el parque de Canalejas. Se encuentra paralelo al litoral y destacan entre sus esculturas los gigantescos ficus centenarios. Las entradas al parque están precedidas por esculturas de piedra de simulando leones y perros. Además cuenta con pequeñas fuentes, un mapa de España tallado en piedra y un monumento al escritor alicantino Carlos Arniches.
También puede dejarse caer por el Palacio Gravina, donde en la actualidad funciona en sus dependencias la Galería Provincial de Bellas Artes.