La ciudad de Málaga en pleno centro de Andalucía en la península ibérica, es además de un lugar paradisiaco para disfrutar del sol y la playa, es un destino turístico ideal para los amantes del arte, la historia, la arquitectura. Cientos de encantos y maravillas podrá conocer mientras transite por sus calles estrechas.
Hay muchos lugares de Málaga que no puede dejar de visitar. El primero de ellos es la Alcazaba, que está considerado el máximo exponente del la cultura musulmana de la ciudad. Se localiza en la ladera de la colina de Gibralfaro. Sus zonas más antiguas datan del siglo XI, lo cual supone que es una edificación más antigua que la Alhambra.
El Castillo de Gibralfaro es también muy frecuentado por los turistas. Fue construido en el siglo XIV y, además de servir de fortaleza, después de la Reconquista pasó a ser residencia del rey Fernando el Católico. Actualmente sólo podemos conocer las ruinas de este majestuoso complejo, el cual nos regala desde su punto más alto las más hermosas vistas de la ciudad.
La Catedral es posterior a la época de la Reconquista. Se levanta sobre los restos de la antigua mezquita mayor de la ciudad y se terminó de construir en el siglo XVIII. Es considerada uno de los 10 monumentos religiosos más visitados de todo el país..
Por otra parte, el Gibralfaro no solo tiene monumentos de la dominación mora, sino también más antiguos. Vale la pena destacar el teatro romano, que fue construido en el siglo I y está localizado a los pies de la Alcazaba.
Málaga es la ciudad natal de Pablo Picasso, por lo que hay varios lugares dignos de visitar ligados al célebre artista. Destaca la Casa Natal de Picasso, que actualmente es la sede de la fundación que lleva su nombre. También hay que visitar el Museo Picasso, donde se exponen más de 230 obras del artista malagueño. Entre ellas se encuentran pinturas, dibujos, grabados, esculturas y hasta cerámicas.